Hoy es el día de recoger a nuestro compañero de aventuras, un Dodge Grand Caravan de color verde botella y dar comienzo, ahora si, a nuestro Road Trip particular. Tras colocar el GPS y librar un atasco dejamos atrás New York y nos adentramos en las interminables carreteras norteamericanas para cruzarnos los estados de New Jersey y New York hasta llegar a las famosas cataratas del Niágara.
En total 7 horas de viaje donde te da tiempo a dormir, cantar alocadamente, pedir a camioneros que te toquen el claxon o escribir para este blog.
Llegamos al atardecer, hora en la que los americanos acaban su jornada laboral y así evitamos pagar tanto el parking como la visita a la plataforma ahorrándonos alrededor de 35 dólares para contemplar las poderosa caída de agua entre los lagos Ontario y Erie, marcando la frontera entre Estados Unidos y Canadá.
Tras sacar las fotos de rigor seguimos con nuestra ruta en dirección a Chicago. Dejamos atrás los estados de New York y Pennsylvania pero una tormenta bestial, que justifica el tamaño de los grandes lagos interrumpió nuestro viaje y decidimos pernoctar en Ohio en las cercanías del lago Erie a la altura de Cleveland a pesar de que lo planeado era llegar hasta las afueras de Detroit. En total, 600 millas las que hemos recorrido hoy o casi 1000 kilómetros si así lo prefieren, ahí queda eso!
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